La formación profesional es un recurso valioso tanto para quienes buscan empleo como para los empleadores.
Conocida como “el otro título de cuatro años”, la formación profesional brinda a los participantes la oportunidad única de aprender un nuevo oficio al mismo tiempo que reciben un salario y un certificado de finalización reconocido a nivel nacional para ayudarlos a iniciar una nueva carrera.
Los empleadores con programas de formación registrada tienen la oportunidad de desarrollar y retener una fuerza laboral calificada y leal al mismo tiempo que reducen la rotación, creando una fuerza laboral más diversa.